De nuevo se avecina el verano y las piscinas, mínimamente mantenidas durante los últimos meses, se empiezan a preparar para otros tres o cuatro meses de disfrute. Esta temporada la situación sanitaria hace que se presente una reapertura de piscinas mucho más compleja. Entre otras medidas, ha surgido la necesidad de llevar a cabo un control de aforo que facilite el distanciamiento social para minimizar las posibilidades de contagios. Comunidades de propietarios, ayuntamientos, campings y complejos residenciales se afanan para adaptarse a la nueva situación y tenerlas a punto cuando el calor empiece a requerirlas: tratar el agua, cortar el césped, repara la valla o puerta de acceso, contratar socorrista, disponer de un sistema de control de aforo… Tareas que en muchas ocasiones abruman a las personas encargadas de su gestión cuando recuerdan los problemas con los que se encontraron en veranos anteriores y que temen volver a encontrar un año más.… Read More